El músico canario Juan Belda es todo un referente en la música jazz en este país. No sé si él estará muy de acuerdo en acotar su propuesta a un estilo, y creo que me lo rebatiría y con razón ya que lleva desde los 80 esculpiendo heterogéneos imaginarios sonoros. No encontrar la tónica en este caso es mandato obligatorio, y en sus creaciones hay una fusión de estilos indomable, de una riqueza en matices maravillosa. No me extraña que desde las cloacas del underground transmita sonidos tan bellos si le acompañan en la aventura músicos tan curtidos en tensar dialécticas disruptivas como Javier Colis, Jorge Pardo, Pelayo Arrizabalaga, Juanjo Ortí, Enrique Bárbaro, Ricardo Marichal, Samuel Tarraco, y Epi Llorente, que junto a Belda a los teclados, guitarra synth, moog y fx conforman una agrupación modélica.